Me andaba yo preguntando últimamente dónde tendrían escondido al Ibarretxe que nos ha aburrido y nos ha reñido tanto en estos últimos años. Se ve que sus coordinadores de campaña le habían aconsejado que estuviese callado en las cuestiones del raca-raca identitario y que se dedicase en cuerpo y alma a inaugurar y vender cualquier cosa aunque esta sea mercancia vieja.
Hoy han presentado en Vitoria el tandem tan bien avenido de Ibarretxe-Urkullu el programa electoral del PNV y como los programas de los partidos me interesan mucho pues le he hecho una rápida lectura en diagonal y he visto la mejor promesa para los próximos años que nos ofrece el PRI vasco : «Un sistema bilateral de garantías, sustentado en un concierto político, que impida la restricción unilateral del pacto alcanzado.»
ABRACADABRA!!! ya tenemos la palabra totem-mágica del PNV para los próximos cuatro años. Un concierto político??? qué es eso??? un acuerdo? pues si es un acuerdo porqué no les sirve la palabra Estatuto como al resto del mundo. El estatuto nace del acuerdo y solo puede ser renovado por medio del acuerdo. Por qué buscar palabras y definiciones oscuras, yo después de estos años ya he averiguado por qué . Por que no quieren llegar a ningún sitio, quieren enredarnos en otro debate identitario que no nos conduce a nada. CONCIERTO POLÍTICO – DESCONCIERTO CIUDADANO.
Me viene a la memoria el debate surrealista que tuvimos hace poco en el que no se ponían de acuerdo en cómo llamar a la selección vasca de futbol si Euskadi o Euskal Herria. Si el PNV no sabe todavía cómo se llama este pueblo es que tiene un problema más serío aún que su propia división interna.
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